La Procuraduría General de la Nación solicitó a la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), proporcionar información detallada sobre las medidas inmediatas y de contingencia adoptadas en el manejo y administración del recurso hídrico para reducir el riesgo en materia de oferta y disponibilidad del agua en la región.
Entre la información requerida se encuentra la remisión de los reportes o alertas emitidos por la Corporación durante los años 2023 y 2024 en relación con los niveles de los embalses, así como un reporte de los cuerpos de agua destinados para la generación de energía y abastecimiento.
Además, se solicita información sobre las estrategias implementadas para priorizar las concesiones de agua con fines de consumo doméstico y seguridad alimentaria, así como las proyecciones de hidrología para el año 2025. Se espera confirmar si se ha proyectado un plan de choque para mejorar los niveles de capacidad en los embalses para el próximo año.
La Procuraduría también recordó a las autoridades ambientales y territoriales la importancia de implementar acciones en casos de escasez crítica de agua debido a sequías, contaminación, catástrofes naturales o perjuicios causados por el ser humano, que puedan limitar los caudales útiles disponibles.