La mayor central comercializadora de alimentos del país se convirtió en escenario de varias realidades difíciles de superar, sin que una afecte la otra. Corabastos es una de las causas de que Kennedy, localidad donde está ubicada, registre más de 3 mil contagios de coronavirus.
Para atajar ese fenómeno se adoptaron restricciones para su funcionamiento, desde horarios para descargue de alimentos, ingreso de compradores, protocolos sanitarios en su interior y prohibiciones de circulación en sus alrededores.
Pero esto derivó con los días en protestas de los comerciantes que vieron sensiblemente disminuidas sus ventas, que achacaron a la orden de no llevar más allá del 30% el aforo de la central lo que afectó la presencia de compradores, previa la prohibición de no aceptar a minoristas.
Pero otra circunstancia agravó el funcionamiento de Corabastos. La afluencia de camiones con sus ocupantes que llegan a la central desde las zonas de producción derivó que con el regreso a sus zonas de origen, campesinos empezaran a resultar positivos y en esas condiciones regresaran a la zona rural.
La suma de estos hechos terminó por generar un ambiente tenso en la central que finalmente desencadenaron en enfrentamientos de comerciantes con la fuerza pública, cuando se decidió el cierre de 4 bodegas donde se detectó el mayor número de contagios por coronavirus.
Sumado a lo anterior se evidenció un reclamo de los comerciantes contra la gerencia de Corabastos a la que acusaron de adoptar medidas en la central con carácter unilateral.
Es así como el hecho de que Corabastos maneje casi que monopólicamente la comercialización de los alimentos que se consumen en Bogota y áreas circunvecinas, el temor de un cierre total obligó a la búsqueda de acuerdos para garantizar su funcionamiento.
Pico y Puesto
A partir del próximo lunes se pondrá en funcionamiento la medida de ‘pico y puesto’. Los locales pares funcionarán un día y al siguiente los impares, lo que garantizará una menor afluencia de comerciantes y trabajadores y la garantía del distanciamiento social.
Dos horarios de funcionamiento
El primer horario que será para atención al público comprador funcionará de 12:30 p.m. a 12:30 a.m . El segundo, que es de abastecimiento, funcionará de 11:00 a.m. a 12:00 p.m, en el mismo, los trabajadores de la central, recibirán todos los alimentos del campo y realizarán las labores de distribución en los establecimientos comerciales de la ciudad.
Sobre el funcionamiento de las 4 bodegas, que se convirtieron en el florero de Llorente, se definirá en las próximas horas como podrán operar. Decisión que resulta urgente ante protesta de productores y comerciantes que aseguran que productos como cebolla y tomate que se comercializan allí se están perdiendo.
Lo vivido a raíz de la pandemia en Corabastos evidenció la vulnerabilidad de la seguridad alimentaria de la capital colombiana y zonas vecinas y la necesidad de avanzar en la descentralización de la comercialización de los productos que llegan desde el campo.
Eso significa la instalación de bodegas en sitios estratégicos de la ciudad que permitan además un menor protagonismo de intermediarios que encarecen los productos.