Bogotá de espalda a derechos de la mujer

Se confirmó lo que se intuía. Bogotá está habitada por más mujeres que hombres, lo que de por sí resulta maravilloso para quienes profesamos un amor impenitente por ellas.

Pero eso impone aún más la pregunta obligada ¿Esta ciudad observa, genera, crea los espacios en las diferentes esferas para evidenciar que el reconocimiento de los derechos de la mujer es una realidad?

No debemos devanarnos mucho los sesos para concluir que NO.

Hoy el 52% de la población en Bogotá es de mujeres que deben en su gran mayoría debatirse en inferioridad de condiciones frente a hombres, y lo dice un hombre, en los que permanece intacto ese espíritu machista de creerlas propiedad y no semejante, objeto que no persona, subalterna eterna que no líder.

Estadísticas frías que debieran conectarnos con la realidad que viven, nos muestra que hoy el 84% de las mujeres víctimas de ataques sexuales son menores de 18 años, que cada hora una mujer en Bogotá es víctima de violencia interpersonal.

En suma Bogotá ostenta un triste y penoso liderato de ser la ciudad en Colombia donde más se violenta a las mujeres.

Lucía Bastidas, de la bancada de mujeres concejales en Bogotá, evidenciaba en un reciente debate  en el cabildo distrital que persisten algunos programas sociales que tratan a las mujeres como minorías.

Se dolía y con razón de las largas e intensas horas de espera que tienen que hacer las mujeres para que les reciban las denuncias.

Revelaba Lucía Bastidas que instituciones como Medicina Legal incrementan el maltrato a las mujeres violentadas por su pareja, porque la posibilidad de denunciar desaparece si ello ocurre un fin de semana ya que solo atienden de lunes a viernes.

Este dato nos pone de cara con la realidad de la situación de las mujeres en la ciudad.  Cada hora una mujer en Bogotá es víctima de violencia interpersonal, este año van 7.926 casos denunciados.

Un concejal que trabaja su primer periodo en el cabildo, Jorge Torres de Alianza Verde, fue el único que como hombre, de muchos que hay en el Concejo, se atrevió a señalar “el machismo” como un estereotipo cultural del hombre que pone en permanente riesgo la vida de la mujer con expresiones repetidas como “si le pegó seguro se lo busco’, ‘si te quiero te aporrio’, ‘sin celos no hay amor’ y así muchos otros más.

Torres dijo: “Los hombres somos actores del cambio cultural, cambiar estereotipos de celos posesivos, violencia psicológica, y la no reproducción de estereotipos de darle a la niña la cocina y al hombre las herramientas, ayuda a no generar ningún tipo de violencia contra las mujeres”, en lo que tiene toda la razón.

Una estadística que añado y que procede de las reveladas por la bancada conservadora en el Concejo retratan la situación de la mujer en la ciudad: En los primeros nueve meses del 2016, en Bogotá se presentaron 8.138 casos de violencia física contra mujeres a manos de sus parejas, con un incremento del 15%frente al mismo periodo del 2015, cuando ocurrieron 7.084 casos”.

Desde lo público es hora de con firmeza generar programas contundentes que respondan a las necesidades e intereses de las mujeres para avanzar hacia la equidad e igualdad.

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