Recursos de alimentos escolares que se comieron clanes delincuenciales

Las raciones escolares de niños en colegios públicos de Bogotá fueron convertidas en un sucio negocio de individuos que, sin reparo alguno, como lo denunció la Superintendencia de Industria y Comercio, conformaron un cartel para abalanzarse sobre esos presupuestos y asaltarlos sin piedad.

El robo continuado lleva a por lo menos tres administraciones, unas que fueron pasivas frente al cartel y las dos últimas, Petro y Peñalosa, que decidieron la primera intentar un cambio de modelo de contrataciones de los alimentos escolares y la segunda, Peñalosa, que consolidó el esquema.

Lo que debe seguir es un actuar profesional de la Fiscalía para lograr condenas ejemplares contra los integrantes de estos clanes que saquearon las raciones escolares y en el Distrito control y monitoreo permanente sobre estos procesos licitatorios que no son de poca monta.

Se está hablando de 500 mil millones de pesos al año para garantizar un millón de raciones de alimentos entre comida caliente y refrigerios.

Escuche aquí las reacciones del Alcalde Peñalosa y la Secretaria de Educación, María Victoria Angulo, ante la revelación de la Superintendencia de Comercio sobre la existencia del cartel de la alimentación escolar en la capital.

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