Desde el próximo 30 de septiembre, el Distrito adelantará el octavo censo de ciudadanas y ciudadanos habitantes de calle como parte de la estrategia para reducir las formas extremas de exclusión contra esta población.
Este proceso incluirá 42 preguntas distribuidas en 13 dimensiones, y contará con la participación de 599 funcionarios durante 15 días y 15 noches en tres jornadas, que abarcarán las fases de alistamiento, apertura, desplazamiento, recolección y entrega de la información.
En el desarrollo del censo participarán la Secretaría de Integración Social, el Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud (IDIPRON) y la Secretaría de Planeación.
La información recopilada se utilizará en distintos componentes de la estrategia de prevención y mitigación, incluyendo la prevención del consumo problemático de sustancias psicoactivas, la prevención de la violencia en el contexto familiar, y en los proyectos de vida para la superación de la habitabilidad en calle.
Entre los objetivos del censo se encuentran establecer el número y la ubicación de la población habitante de calle, determinar los factores asociados a esta condición y generar información actualizada que permita a las entidades diseñar una oferta de servicios integrales.
Además, el Distrito podrá identificar las principales necesidades de esta población y recopilar variables que permitan el cruce de datos con registros administrativos para el desarrollo de políticas públicas.
Una vez finalizada la recolección de la información, se procederá a su análisis entre los meses de octubre y noviembre. Los primeros resultados se presentarán a finales de año y los resultados finales se conocerán en enero de 2025.
El último censo de habitantes de calle en Bogotá, realizado en 2017, registró 9.538 personas viviendo en esta condición. Sin embargo, se estima que esta cifra ha aumentado en los últimos años debido a la emergencia sanitaria por el Covid-19, la crisis económica y los flujos migratorios.