Por: Carlos A. Alvarez S.
A pesar de que es un convencido de las bondades de Transmilenio para enfrentar en el mediano y largo plazo la movilización de los bogotanos, el alcalde Peñalosa en opinión incluso de críticos comienza a entender que no puede apostarle solo al sistema de transporte masivo y que no puede retardar más decisiones frente al otro sistema que alimenta Transmilenio y deberá hacerlo con el futuro metro: El sistema Integrado de Transporte, SITP.
Hoy el alcalde se fue hasta el portal de la calle 80 y en un taller contiguo presenció la entrada en funcionamiento de 80 nuevos buses que reforzarán rutas de la calle 80 y el Tintal Zona Franca.
La inquietud es notoria entre los ciudadanos sobre los vehículos del SITP más cuando se supo que los autopartistas hace más de un año no volvieron a venderles repuestos a los operadores en razón a una gigantesca deuda que mantienen con los proveedores.
Son inocultables los problemas del SITP y el propio Peñalosa tiene que reconocerlo al afirmar que lo encontró con enormes huecos financieros.
Como ya es habitual el alcalde Peñalosa enfatizó sobre cómo marcha el camino del Metro y troncales de Transmilenio que en su gobierno quiere dejar construidas o contratadas.
Los buses que se entregaron hoy reforzarán rutas de la calle 80 y el Tintal, y fortalecerán la flota del operador Este es mi bus. Tendrán capacidad de 50 pasajeros.