Se conoció el primer diseño conceptual del Corredor Verde para la Carrera Séptima. Es el fruto de cruzar el conjunto de iniciativas presentadas por la ciudadanía en el último mes, con las características de la vía en su trazado y especificidades.
El Corredor Verde es la apuesta de la administración López dispuesta a poner distancia frente a lo que proyectaba Enrique Peñalosa que era una troncal de Transmilenio por la séptima.
Sin embargo la ciudad acostumbrada a persistir en el debate y poco a la adopción de decisiones, evidencia con este proyecto, la polarización que se vive representada entre quienes tomaron la bandera de defender sin concesiones la troncal, ya descartada por completo, y quienes se matricularon incondicionalmente con el Corredor Verde.
Los unos abrazan la iniciativa de la alcaldesa con el argumento que es lo viable en la 7ª frente a lo que se proponía con la troncal que resultaba técnicamente un desastre y financieramente muy costoso.
Los otros sostienen que lo planteado con este primer diseño conceptual del Corredor Verde no es otra cosa que un Transmilenio ya que se plantea la adopción de un corredor con carril exclusivo para buses.
Especialistas en movilidad identifican la propuesta del Corredor Verde como mejor, aunque no sustancialmente, frente a lo que pretendía Peñalosa y lo sustentan en que garantiza condiciones de uso para peatones y ciclistas en desmedro del uso que podrían hacer los vehículos particulares.
No habrá tranvía
Quienes abrigaban la esperanza de un tranvía eléctrico que cruzara de sur a norte o viceversa la carrera séptima fueron notificados hoy que esa posibilidad se desecha.
A juicio de la administración López esta opción dividiría la séptima igual que lo haría una troncal de Transmilenio. Lo considera un proyecto riesgoso, que transportaría menos gente, estimularía el uso del carro particular con las consecuencias contaminantes que esto conllevaría y podría costar tres veces más que el presupuesto con el que cuenta la ciudad.
Las tres séptimas
El diseño conceptual presentado hoy parte de la premisa que en la Carrera Séptima conviven tres tramos que son diferentes y por lo tanto su intervención debe considerar sus características propias.
• Séptima Centro (Calle 1 hasta la Calle 40):
Representa el patrimonio histórico de Bogotá y Colombia. Tiene un alto flujo peatonal y vocación de permanencia, se realizan en su mayoría viajes cortos y a pie. En esta zona se concentra comercio, instituciones e hitos arquitectónicos.
• Séptima Chapinero (Calle 40 hasta la Calle 100):
Es el centro financiero de Bogotá. Concentra sitios de encuentro turístico y ciudadano y presenta una mezcla de viajes cortos y largos. Esta zona concentra comercio, servicios, restaurantes y vivienda.
• Séptima Usaquén (Calle 100 hasta la Calle 200):
Es receptor y generador de viajes, presenta mala conectividad, se realizan viajes largos y no tiene transporte masivo exclusivo. Esta zona tiene alta concentración de residencias y patrimonio ambiental desaprovechado. Con este proyecto se beneficiarán cerca de tres millones de personas, principalmente a los habitantes de las localidades de Chapinero, Santa fe y Usaquén.
Generalidades del Diseño Conceptual
En el reto del Corredor Verde, la Administración Distrital con el apoyo de Gehl Architects y el Banco Interamericano de Desarrollo, asegura haber incorporado los criterios de movilidad sostenible, sentido de lugar y conexión ambiental.
El diseño conceptual que se propone da a los peatones el 50% del espacio, no sólo con andenes amplios, sino con 16 nuevas plazas y alamedas a lo largo del corredor, que cumplen con las normativas de andenes, espacio público y accesibilidad universal. Se busca que además sean lugares que permitan disfrutar la estadía en la séptima y no sólo estar de tránsito por allí.
Las bicicletas tendrán un 6% de la vía; el transporte público tendrá el 29% del espacio con carriles exclusivos y no preferenciales, y el restante 15% es para los carros particulares. El corredor actual contempla el 50% del espacio para los carros y tiene muy mala infraestructura peatonal y de movilidad limpia.
Dentro de las características del diseño presentado se destaca la ciclo-infraestructura de 24 kilómetros a lo largo de todo el corredor, las estaciones abiertas, la siembra de árboles nativos, carriles exclusivos para el transporte público eléctrico, el sistema de plazas-alamedas públicas, drenajes sostenibles, jardines verticales, iluminación, zonas y corredores verdes transversales conectando el corredor con los cerros orientales, los parques y vías bajantes, así como un cable que conecte el Centro Internacional con Monserrate, los barrios altos de la localidad de Santa Fe y la primera línea del Metro de Bogotá.
El Corredor Verde Séptima no sólo intervendrá la vía desde la calle 26 hasta la calle 200 sino que además ya tiene los recursos previstos para integrar en el diseño y la funcionalidad de conexión verde del corredor, su conexión ambiental y de movilidad sostenible en los cruces con las calles 45, 53B, 72, 73B, 79, 85, 92, 94, canal molinos, y calle 116.
Según lo establecido en el Plan de Desarrollo Distrital, la propuesta de un sistema de transporte público masivo cero emisiones permitirán conectar la carrera séptima con los proyectos de movilidad del borde oriental como: la extensión de la Primera Línea del Metro, el Regiotram del Norte, el Cable Aéreo de Usaquén y de la Avenida 68. Teniendo en cuenta que esta vía es distinta en su trazado y en sus características, se presentan tres diseños conceptuales para tres séptimas:
El costo total del proyecto es de 2 billones de pesos y los recursos para ejecutarlo están garantizados.
A partir de hoy se abren nuevamente las posibilidades de participación. Una nueva etapa de discusión y aportes para revisar y evaluar este diseño conceptual. Se abrirán espacios de discusión y análisis para llegar a consensos que le permitan a la Administración contratar el diseño final del Corredor Verde de la Carrera Séptima en diciembre.
Para que los ciudadanos puedan participar, los diseños están al alcance de todos en la página web www.septimaverde.gov.co, para su observación y análisis. En el mismo portal, las personas interesadas podrán conocer puntualmente los nuevos espacios de participación abiertos para esta fase. Luego de esta segunda fase de discusión pública y de que sea presentado el diseño final, se solicitará al Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) la apertura de los procesos de licitación para contratar los estudios y diseños de lo que será el primer Corredor Verde de nuestra ciudad.
Los próximos meses no estarán exentos de más polémica si se tiene en cuenta que la propuesta del diseño conceptual del Corredor Verde que se conoció hoy no es la definitiva y solo es el punto de partida para iniciar la segunda fase de participación ciudadana en la búsqueda de poder representar al final una Séptima que interprete el querer de la mayoría de ciudadanos, cosa que se advierte difícil por la ya referida radicalización de conceptos que nace de la defensa de proyectos de gobiernos antagónicos como lo son el anterior y el actual.