Hoy el Cabildo Distrital fue protagonista de un nuevo debate de control político sobre el futuro del proyecto Metro de Bogotá que ya se está ejecutando, pero que en los últimos dias se ha llenado de incertidumbre por el deseo del presidente Gustavo Petro, de analizar las posibilidades jurídicas y técnicas para cambiar parte del diseño.
En diálogo con Bogotá AMPM, varios concejales sentaron su postura sobre el futuro del proyecto de infraestructura más importante de la historia de la ciudad.
Los que apoyan el metro elevado
La concejal María Clara Name de Alianza Verde, defiende la continuidad del proyecto de la Primera Línea del Metro como se está ejecutando y le pidió al Gobierno Nacional que no se siga inmiscuyendo en los temas de Bogotá.
Por su parte María Victoria Vargas, concejal Liberal, señaló que la discusión son solo caprichos del gobierno de turno que busca intereses particulares. Asegura, que en esta, ‘la pelea del siglo’ los más perjudicados son los bogotanos que llevan esperando el metro más de 70 años.
Marco Acosta de Colombia Justa Libres, cuestionó que no es claro de dónde van a salir los recursos para las modificaciones que quiere el presidente, aseguró que lo más probable es que los bogotanos paguen más impuestos para financiar el capricho del Gobierno Nacional
Rolando González de Cambio Radical señaló que Bogotá necesita metro tanto subterráneo como elevado, pero que la línea que se está realizando no se debe echar para atrás, cuestionando al Gobierno Nacional de intentar quitar el sueño de más de ocho décadas.
Por su parte, Jorge Colmenares de Centro Democrático no entiende por qué se sigue discutiendo un tema que parecía superado y el gobierno no logra entender los riesgos que traería el ego del presidente Petro.
Los que apoyan el metro subterráneo
Según Carlos Carrillo, concejal del Polo Democrático, la discusión no se debe reducir si el metro debe ser elevado o subterráneo, lo importante es que el sistema debe ser de alta capacidad y no debe ser un alimentador de Transmilenio.
Para Heidy Sánchez de Colombia Humana, la alcaldesa se está dejando presionar por los operadores privados de Transmilenio al querer dejar «la chambonada que tiene el Distrito y no tener un mejor trazado de Metro».
Celio Nieves del Polo Democrático manifestó que los estudios se pueden modificar, porque según la mandataria distrital no hay estudios finales de la primera Línea del Metro, y las obras que se están realizando aún no inciden en el diseño de un trazo subterraneo.
Por su parte, Diego Cáncino de Alianza Verde, señaló que la mejor opción que merece Bogotá es el metro subterráneo que solucione la movilidad de la ciudad y acabe con el alimentador elevado de Transmilenio que no solucionará los problemas de movilidad.
Este viernes continuará en el Concejo el debate de control político sobre el futuro del trazado del Metro de Bogotá.