Ese fue el concepto que entregó la firma Fajardo Abogados, contratada por la Empresa Metro de Bogotá para determinar la viabilidad de la propuesta del Gobierno Nacional de subterranizar la Primera Línea del Metro de Bogotá.
Según el documento, no resulta jurídicamente viable la modificación de la tipología del metro que se encuentra definida dentro del Contrato de Concesión 163 de 2019.
“Esta firma, en más de 300 páginas le dice a la Empresa Metro que los pliegos y el contrato se estructuraron para un Metro elevado que son ley para las partes y de lo contrario podríamos estar incluso en diferentes responsabilidades de tipo penal, fiscal y disciplinaria”, señala el concejal Humberto Amín.
Una vez conocido el concepto, la alcaldesa Claudia López confirmó que fue enviado al Gobierno Nacional para su respectivo estudio la próxima semana.
“Acordamos que nosotros pediríamos también un par de conceptos jurídicos. Los recibimos, se los entregamos a la Secretaría Jurídica de la Presidencia de la República y tenemos mesa nuevamente la próxima semana para analizar los mismos en detalle”, afirmó la mandataria.
La alcaldesa reiteró que el metro seguirá en construcción a pesar de los posibles cambios y solo falta la licitación del corredor verde de la Carrera Séptima, para formar toda la obra del sistema de transporte en la ciudad, además se continuará con el proceso de contratación de la segunda línea del Metro hasta Suba y Engativá.