Tras agotarse el tiempo sin realizar el debate en el Concejo de Bogotá, la alcaldesa Claudia López firmó el decreto del presupuesto del 2023 por 31.5 billones de pesos.
26.1 billones de pesos serán destinados para inversión.
El 51% se destinará a los sectores de Educación, Salud, Integración Social y Hábitat; el 33%, al de Movilidad y el 10%, al sector Gobierno (principalmente recursos para los Fondos de Desarrollo Local) y al sector Cultura.
Estos recursos deberán garantizar mantener en ejecución mil frentes de obra de 215 proyectos de infraestructura, entre ellos: 101 de Hábitat, 59 de Movilidad y 51 de Salud, Educación, Cultura y otros sectores, así como 674 proyectos de mantenimiento vial en las alcaldías locales.
Además, con recursos de este presupuesto se buscará contratar la Segunda Línea del Metro, el Corredor Verde de la carrera séptima, la calle 13 y el cable San Cristóbal.
Deberán terminarse 16 centros de salud y se aseguran recursos para cubrir las vigencias futuras de los nuevos hospitales de San Juan de Dios, Bosa y Usme.
En materia de empleo y seguridad contempla la creación de más de 70.000 nuevos empleos, a través de estrategias como el Mejoramiento Operativo de la Agencia Pública de Empleo del Distrito, el Pago por Resultados y el Empleo Incluyente.
Se construirán dos nuevas Unidades de Reacción Inmediata en las localidades de Suba y Tunjuelito y deberá terminarse al 100% la nueva sede de la Policía Metropolitana de Bogotá.
En el presupuesto 2023 quedó contemplado que cerca de 56 mil jóvenes serán becados con el programa ‘Jóvenes a la U’ y se ofrecerán 28 mil oportunidades de acceso a trayectorias de formación de ciclo corto en sectores de tecnologías de la información, cambio climático, cuidado y salud.
Con el presupuesto se espera atender 280.000 hogares en el programa Ingreso Mínimo Garantizado, se entregarán 478 subsidios de vivienda, deberá realizarse el mejoramiento habitacional de 2.135 hogares y se asignan 500 subsidios para el mejoramiento progresivo de vivienda.
Cerca de $3,9 billones se destinarán para gastos de funcionamiento y $1,6 billones serán para el servicio de deuda.