El concejal Leandro Castellanos denunció serias irregularidades en las obras del puente vehicular de la calle 153 con Autonorte, una construcción que debía estar terminada hace más de dos años y que hoy sigue inconclusa, con apenas un 55 % de avance.
El proyecto, adjudicado al Consorcio Vial Colombia 2021, inició el 2 de diciembre de 2021 con la promesa de mejorar la movilidad en el norte de la ciudad. Sin embargo, tres años después, lo que hay —según el cabildante— es “un elefante blanco en plena Autonorte”, con un retraso superior al 29 %, procesos sancionatorios en curso y una inversión que ya supera los 56 mil millones de pesos.
Castellanos reveló que el propio Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) ha tenido que abrir procesos disciplinarios contra el contratista por incumplimientos reiterados, entregas fuera de tiempo y negligencia en la gestión de documentos y actas.
“Esto es un insulto para los ciudadanos. El IDU y el contratista están jugando con la paciencia de miles de familias que todos los días quedan atrapadas en los trancones por culpa de una obra que parece no tener fin”, denunció el concejal.
A esto se suman errores en los Planes de Manejo de Tráfico (PMT), que han generado caos en las orejas oriental y occidental del puente, dejando a conductores y residentes soportando interminables trancones.
Además, el contratista solicitó una prórroga de 10 meses, y aunque el IDU le exigió asumir más de 3.600 millones de pesos por los retrasos, la ciudadanía continúa viendo el mismo panorama: una obra lenta, sin resultados visibles y sin responsables claros.
“Este puente debía ser una vía para mejorar la movilidad, pero se volvió el símbolo del desgobierno y la ineficiencia pública. ¡No más excusas! Queremos una fecha definitiva de entrega y sanciones ejemplares”, exigió Castellanos.
El concejal anunció que llevará el caso al Concejo de Bogotá y aseguró que no descansará hasta que el IDU rinda cuentas ante la ciudad.